Mundo árabe y Asia
Prioridades
Principales líneas de actuación
La actuación de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo en el Magreb y Oriente Medio durante 2019 se centró en los países de asociación (Mauritania, Marruecos y Palestina) y los de cooperación avanzada (Egipto, Túnez y Jordania) para la Cooperación Española en la región. Materias como la consolidación de la democracia, la igualdad de género, la educación y el desarrollo económico constituyeron el eje de actuación de las iniciativas de cooperación en el terreno, así como la atención a las personas refugiadas sirias y saharauis como una tarea capital para la acción humanitaria española.
Migración y desarrollo
La AECID, en colaboración con la Unión Europea, abordó varios proyectos centrados en la estabilidad económica y las causas profundas de la migración ilegal. En Mauritania se ejecutaron los proyectos RIMRAP (resiliencia del sector agrícola y ganadero), dotado con 5M€; PROMOPÊCHE (empleo y condiciones de vida de los pescadores artesanales), provisto con 10M€ y la III fase del Pacto de los Alcaldes (eficiencia energética), cifrado en 2M€.
Marruecos, a su vez, fue beneficiario de los programas “Kafaat Liljamia” (formación profesional para jóvenes vulnerables), dotado con 963.000 €; “Convivir sin Discriminación” (prevención del racismo, xenofobia y otras formas de discriminación), valorado en 4M€ y la ayuda complementaria a las políticas migratorias (integración de la población migrante), con un presupuesto de 1,5M€.
El eje principal de MASAR es el intercambio de mejores prácticas y el establecimiento de redes que beneficien a estos países: Túnez, Egipto, Libia, Marruecos, Argelia, Mauritania, Jordania, Líbano y Territorios Palestinos
Programa Masar
La cooperación con el Magreb y Oriente Medio se estructuró a través del programa MASAR (camino en árabe) implementado en Túnez, Egipto, Libia, Marruecos, Argelia, Mauritania, Jordania, Líbano y Territorios Palestinos. Actualmente, este plan, iniciado en 2012, se reformula para encarar los cambios experimentados en estas regiones. Su eje principal es el intercambio de mejores prácticas y el establecimiento de redes que beneficien a estos países.
Durante 2019, tuvo dos desarrollos específicos en cuestiones fundamentales, la igualdad de género y la utilización del agua. Así, la Agencia Se renovó el plan MASAR-GÉNERO en torno a cuatro prioridades: empoderamiento económico de la mujer, tratamiento de los medios de comunicación a la desigualdad, participación femenina en todos los ámbitos sociales y protección de los derechos de las niñas y las mujeres.
El programa MASAR-AGUA dio sus primeros pasos en un seminario celebrado en la sede de la AECID en Madrid. Esta iniciativa pretende fomentar la cooperación técnica entre las instituciones españolas y los países integrados en este plan para mejorar la gestión de los recursos hídricos en la región.
POBLACIONES REFUGIADAS En Jordania, la Agencia apoyó las capacidades de acogida de la población siria desplazada por la guerra y de las comunidades que la acogen, a través del programa QUDRA. En su primera fase, con un importe de 2,1M€, se fortalecieron las condiciones de tres enclaves afectados por la llegada masiva de refugiados (Ramtha, Sarham y Mafraq). La segunda, con un presupuesto de 5M€, amplió el trabajo a seis municipios más.
REFUERZO INSTITUCIONAL El compromiso de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo con la consolidación de la democracia y la defensa de los derechos humanos tuvo en 2019 en Filipinas un impacto reseñable. En este país, Así, en Filipinas, además de desarrollar iniciativas contra las crisis humanitarias, también se concretaron actuaciones para reforzar el Estado de Derecho, especialmente en las regiones afectadas por conflictos bélicos. Mención aparte merece la iniciativa GO JUST, cuyo proyecto de Derechos humanos, ejecutado por la Agencia, apuntaló el funcionamiento de la Comisión Regional de Derechos Humanos en la Región Autónoma de Mindanao Musulmán.
En Jordania, es preciso enfatizar el programa Qararuna cuyo objetivo fue la reforma del sistema electoral, el funcionamiento del Parlamento y el aumento de la influencia de la sociedad civil en las políticas públicas. Además, se apoyó al Ministerio de Justicia en el establecimiento de un sistema de asistencia legal gratuita.